Sabemos que esta es una de las preocupaciones tanto para los empresarios como para los trabajadores. Todos conscientes de que tenemos que volver a una nueva normalidad donde evitemos un nuevo repunte de la COVID19.
Las medidas de contención adoptadas han sido favorables para el control de la epidemia, pero su impacto en la actividad económica está siendo muy negativo. No es realista pensar que se puede mantener la situación de confinamiento hasta que se encuentre un tratamiento contra la COVID19 o, al menos, hasta que la mayoría de la población sea inmune. Por ello es necesario realizar una transición hacia la denominada “nueva normalidad”.
El “plan de desescalada” ya tiene asignados unos adjetivos: gradual, asimétrico, coordinado y adaptable, que nos hacen intuir que el proceso será lento y requiere la colaboración de sociedad, empresas y entidades públicas.
Desde hoy ya conocemos en qué consisten las cuatro fases planteadas por el Gobierno y cómo nos iremos incorporando a la actividad en cada una de ellas. En la foto que acompaña a este texto, tienes un pequeño resumen de este plan de desescalada.
Con estas directrices como eje principal, algunas empresas ya contemplan medidas como:
- La desinfección y limpieza de instalaciones comunes y vehículos de empresa, después de cada turno de trabajo. Además, se instalarán dispensadores de hidrogel y mascarillas en puntos de atención al público.
- La limitación de aforos, tanto en los espacios de trabajo, como en las zonas comunes. Mantener distanciamiento social entre los trabajadores de al menos dos metros; para ello, la organización de la circulación de personas y la distribución de espacios (mobiliario, estanterías, pasillos, etc.) en el centro de trabajo deberá modificarse en muchos de los casos. Se priorizará el uso de las escaleras sobre el de ascensores y tampoco se permite que los empleados compartan material de oficina, como por ejemplo teléfonos fijos o las salas de reuniones y descanso.
- Algunas fábricas instalarán mamparas de metacrilato entre trabajadores, que les permite verse pero que aseguran la distancia recomendada por las autoridades sanitarias. Además se recomienda ir vestido desde casa con la ropa de trabajo para no usar los vestuarios y lavarse las manos al menos una vez cada hora. Se establecen jornadas intensivas para evitar aglomeraciones en comedores y se ha adelantado la hora de entrada y de salida, o si es posible, establecer turnos.
- Para aquellas actividades que lo permiten, seguir con el teletrabajo permitiendo que algunas personas puedan acceder a las oficinas, un día o dos a la semana y definiendo bien los horarios de cada trabajador en la oficina, para evitar el contacto y masificación. El teletrabajo es quizás la opción más elegida.
Todas las precauciones son pocas para evitar que sigan aumentando el número de fallecidos cada día, así que te invitamos a que estés constantemente informado de las normas y recomendaciones en cada momento y que te tomes la temperatura diariamente, de ese modo, si notas alguna variación, podrás empezar el periodo de cuarentena cuanto antes y evitarás contagios.
Llevamos muchos días haciéndolo muy bien. Hemos demostrado que somos solidarios y que comprendemos la importancia de nuestras actuaciones por el bien común. Ahora entramos en un etapa nueva en la que debemos seguir demostrando que somos una sociedad responsable.
Eva Pérez Martín
Tècnica Autoocupació i
Tècnica d’empresa comarca Pla d´Urgell
Àrea d’Integració Laboral d’ASPID